Pasen y lean. El placer de la lectura es gratuito y vuelvan cuando quieran. ¡Muchas gracias!

Bienvenidos y bienvenidas a mi particular rincón de trastos mentales plasmados en letras unidas unas a otras formando lo que parece una especie de blog o intento de ello.

Espero que disfrutéis por poquito que sea de este pequeño lugar que poco a poco voy amueblando de palabras, recuerdos, experiencias, etc. Ojalá podáis disfrutar tanto como yo, aunque no siempre sea muy agradable el impulso que me hace escribir siendo sincera, de todo lo que podéis encontrar por estos lares.

Dedico un ratejo de mi tiempo, menos de lo que me gustaría a decir verdad, a abrir mi mente y, a veces, aún más mi pseudocorazón.

Dicen que en esta vida se aprende de todo, bueno y malo. He aprendido más malo que bueno o... Quizás sea por mi manera algo pesimista de verla. Por este motivo, doy gracias por las personas que han hecho, hacen y harán que este camino sea menos amargo y más amable.

Lo dicho. Disfrutad cuanto queráis de mi segunda casa y estáis invitadxs a volver cuantas veces os plazca. Si queréis escribir comentarios, adelante.

Un saludo muy grande. Y gracias, siempre!

sábado, 8 de mayo de 2010

Sonrie, te hará falta.




-Siento que debo preguntarte algo.- decía ella, al mirarle a los ojos de un azul tan claro que parecían transparentes. Era como mirar tu reflejo en un espejo, le gustaba.
-Dime que te está rondando por la cabeza, por favor.- él tan cariñoso como siempre. Le acarició y puso esa cara que a ella tanto le gusta tanto, que incluso le hace reir.
-No entiendo el por qué de que un chico como tú esté con una loca sin remedio como yo.

Suele decirse que una imagen vale más que mil palabras. En efecto. él agarró su delicada mano mientras le susurró al oído:

-Porque gracias a ti también estoy loco y sin remedio. ¿Ahora lo entiendes?
-De veras, estás loco.- era tal su sonrisa, que su cara pareció desaparecer entre los blancos y aperlados dientes.

Curiosidades.