Pasen y lean. El placer de la lectura es gratuito y vuelvan cuando quieran. ¡Muchas gracias!

Bienvenidos y bienvenidas a mi particular rincón de trastos mentales plasmados en letras unidas unas a otras formando lo que parece una especie de blog o intento de ello.

Espero que disfrutéis por poquito que sea de este pequeño lugar que poco a poco voy amueblando de palabras, recuerdos, experiencias, etc. Ojalá podáis disfrutar tanto como yo, aunque no siempre sea muy agradable el impulso que me hace escribir siendo sincera, de todo lo que podéis encontrar por estos lares.

Dedico un ratejo de mi tiempo, menos de lo que me gustaría a decir verdad, a abrir mi mente y, a veces, aún más mi pseudocorazón.

Dicen que en esta vida se aprende de todo, bueno y malo. He aprendido más malo que bueno o... Quizás sea por mi manera algo pesimista de verla. Por este motivo, doy gracias por las personas que han hecho, hacen y harán que este camino sea menos amargo y más amable.

Lo dicho. Disfrutad cuanto queráis de mi segunda casa y estáis invitadxs a volver cuantas veces os plazca. Si queréis escribir comentarios, adelante.

Un saludo muy grande. Y gracias, siempre!

viernes, 23 de abril de 2010

Recuerdos melancólicos.


Beach.

Pensé que tanta ñoñería no sería aceptable así que, prefiero comentar esta fotografía( no es de buena calidad lo sé, está hecha desde mi teléfono móvil y pues no se puede pedir más).

Me gusta recordar el ambiente que hay en la playa. Podría describirlo como relajante, reconfortante, bonito, etc. Olvidas todo lo que da vueltas en tu cabeza, por lo menos yo. Una interesante forma de desconectar. Quizás no solo sea un lugar donde ver como un grupo de ancianos se divierten en su particular excursión de low cost o también puedes ver la típica pareja que discute porque ella olvidó la toalla o bobadas así.

Solo diré una cosa, si hay chiringuito allí nos veremos. ;)

Los sueños, sueños son.


Cuando te conocí, pensé que tú serías el hombre que siempre he querido- ¡qué tontería por mi parte!-. Una vez que traté mas contigo, me di cuenta que realmente no eras como creía y sentía que mi sueño se desvanecía. Se suele decir que no es un buen negocio comprar un castillo en una nube, ahora lo entiendo.
Tu me ofreces tanto que no puedo decir un no, tantas y tantas palabras pero no dices por qué me quieres o no, si me amas o no. Simplemente lo resumes con espero que estemos juntos siempre y mientras miras a otro lado. ¿Te crees capaz de mirarme a los ojos y decirme la verdad?

Me conformaré con mirar al cielo y recordar aquel castillo en el que estaría contigo para siempre...

Curiosidades.